Roosen cree que al país sí llegará la globalización

Gustavo Roosen, ex presidente de la CANTV, aseguró ayer en una entrevista concedida a La Verdad que el Estado entenderá rápido la diferencia entre un votante y un cliente luego de haber incursionado en el mundo de los servicios con la nacionalización de la mayor empresa de telecomunicaciones de país.

Quien fuera por 11 años la cabeza visible de la Compañía Anónima Nacional de Teléfonos de Venezuela, aclaró que el sector público tiene frente sí un enorme reto, pues un votante ''es un cliente que se comporta de manera distinta en un hecho electoral cualquiera'' y un cliente es una persona que va a esperar ''un buen servicio todos los días, a toda horas y siempre mejorando''.

Roosen, quien admite que aún es usuario de Movilnet -empresa filial de CANTV- aprovechará hoy su estadía en Maracaibo para ofrecer al mediodía una conferencia sobre Responsabilidad Integral Corporativa en la Cámara de Comercio de la ciudad.

- A través de su conferencia de hoy sobre Responsabilidad Integral Corporativa, ¿qué le recomendará a las empresas privadas?

- Lo que he querido hacer en esta conferencia es transmitir los valores que están implícitos en una nueva manera de enfocar el trabajo de la empresa en Venezuela. La responsabilidad integral consiste en atender constantemente los diferentes públicos de interés con los que se vincula una empresa en su actividad diaria: clientes, usuarios, proveedores, aliados estratégicos, accionistas, financistas, la comunidad en general, el Estado como regulador y los trabajadores. Con cada uno de estos públicos de interés la empresa debe acometer metas dentro de sus planes estratégicos, para ir mejorando la percepción que tengan esos públicos sobre su actuación. Reconozco que en momentos tan difíciles como los que pasa el país en cuanto a circunstancias políticas, pueden haber temas con mucho más ruido que éste. Sin embargo, la empresa privada va a tener la oportunidad de colaborar con la construcción del país y ellas tienen que estar mejor preparadas para cumplir esa exigencia cuando le venga encomendada.

- Siempre se asocia la responsabilidad corporativa con las empresas privadas pero, ¿qué pasa cuando está en manos del sector público?

- El sector público cuando se mete ya en una actividad de servicio como es las telecomunicaciones va a entender bien rápido la diferencia entre un votante y un cliente. Un votante es un cliente que se comporta de manera distinta en un hecho electoral cualquiera, un cliente es una persona que va a esperar un buen servicio todos los días, a toda horas y siempre mejorando. Ése es un enorme reto para el sector público. Le va a golpear duro la diferencia.

- ¿Cómo los empresarios pueden concentrarse en responsabilidad corporativa mientras el Gobierno le amenaza con expropiaciones y reformas a la propiedad privada?

- El empresariado debe hacer lo que sabe hacer todos los días. Ése es el mejor antídoto frente a todas las amenazas que pudieran estar llegando. Es difícil porque requiere mucho esfuerzo de concentración y uno tiene que ser capaz de abstraerse de los ruidos. Estoy convencido que los países deben fomentar la propiedad como concepto. Tarde o temprano las mejores prácticas socialistas del mundo van a llegar de vuelta a Venezuela. Esas prácticas pasan por tratar de construir un país de propietarios, de pequeños y medianos empresarios, todos con un concepto de propiedad en función social. Estas modalidades de propiedad que se están sugiriendo con la reforma constitucional son ensayos que lamentablemente no han llevado a ninguna parte en los países que se ha aplicado.

- ¿Una empresa con visión socialista, como la nueva CANTV, puede tener éxito para mejorar su calidad y sus servicios?

- Puede lograrlo si se enfoca en la responsabilidad integral corporativa, teniendo al cliente como su principal objetivo de trabajo, capacitando de manera permanente a sus trabajadores, siendo exigente en la promoción, en el desempeño y en la remuneración, teniendo relaciones con la comunidad y desarrollando alianzas estratégicas con sus proveedores. Éstos son esfuerzos permanentes que tienen que hacer las empresas socialistas o no. Si pierden la visión sobre las relaciones de intercambio con sus públicos de interés, a la larga caerá la calidad de sus servicios y eventualmente habrá un rechazo.

-¿Disminuir 20 por ciento a las tarifas no resta ingresos para el mantenimiento de los equipos, plataformas y redes?

- Puedo decir cómo eran las cosas hasta mayo de este año. Las inversiones que se hacen para incorporar nuevos clientes han venido cayendo en importancia relativa porque la tecnología ha ido avanzando. Para captar nuevos clientes hay que invertir menos dólares que lo que habían que invertir hace 10 años. Trabajar en una reducción de tarifas trae como consecuencia que hay un volumen de tráfico mayor sin nuevos clientes, es decir, quien ya era cliente va a hablar más por menos, por lo tanto, obliga a hacer más inversiones para que no se congestionen las redes. Además, la empresa atenderá nuevos clientes para lo cual también tiene que hacer inversiones. Si la suma de los nuevos clientes más los viejos, menos las inversiones que hay que hacer, dan para que el flujo de caja le permita a la empresa llevar adelante un programa de ese tipo, entonces sería un movimiento apropiado. Pero parece que los competidores de Movilnet han hecho otro tanto. Han bajado sus precios. Así que una empresa como CANTV, con el nivel de desarrollo que tiene Venezuela, tiene que prever que 18 por ciento de sus ingresos en dólares tienen que estar separados para ser reinvertidos en el mantenimiento y construcción de redes. En el momento que ese porcentaje caiga el congestionamiento de las redes va a empezar a suceder.

- La nueva CANTV tiene varias metas: activación de 1,2 millones de líneas fijas en 18 meses, instalación de cinco mil teléfonos monederos en 2008, una tarifa residencial social y proveer televisión por internet para el 2008. ¿Son metas factibles?

- Yo dejé la presidencia de una empresa privada que estaba en la Bolsa de Nueva York, la Bolsa de Caracas, que tenía más de 200 mil accionistas. Cuando una persona deja la presidencia de una compañía no opina sobre lo que está sucediendo con su antigua empresa. Sin embargo, considero que esos planes son muy parecidos a las metas que estaban establecidas en el plan estratégico de CANTV que se aprobó en junta directiva de noviembre de 2006 y que entró en vigencia este año.

- Para el año 2010 la nación debería estar cerca de los 20 mil kilómetros de fibra óptica. Es decir, que el trabajo de siete mil kilómetros que realizó la vieja CANTV durante 10 años, el Gobierno pretende desarrollarlo en apenas tres años. ¿Otra meta factible?

- Lo que yo escuché es que la nueva administración de la CANTV quiere acelerar la instalación de fibra óptica en zonas que están poco pobladas, es decir, el sur de país. Aparentemente bajo la premisa del desarrollo del eje sur. Lo que no sería inteligente es instalar fibra óptica donde no vive gente. CANTV no instaló donde ahora se quiere hacer porque la masa crítica de personas que allí estaban no justificaban esas inversiones.

- ¿Es decir que a pesar de ser una nueva directiva aún mantienen los planes de la vieja CANTV?

- Por lo que yo he podido leer sobre los resultados del segundo trimestre y de estas metas, ésos son los mismos objetivos que estaban contenidos en el plan estratégico que entregó la empresa privada que fue vendida el 21 de mayo de este año.

Once años de experiencia

Gustavo Roosen renunció a la presidencia de la CANTV el 13 de febrero de este año cuando el Gobierno compró el paquete accionario que tenía la norteamericana Verizon sobre la telefónica.

El cargo quedó temporalmente en manos de Vicente Llatas hasta que en junio el jefe de Estado, Hugo Chávez, designó a Socorro Hernández, ex directiva de PDVSA, como la presidenta de la empresa recién nacionalizada.

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